El pasado 7 de mayo de 2025, la cantautora española Mafalda Cardenal ofreció una noche inolvidable en el Metapatio, presentando su más reciente álbum «mis notas de voz», un proyecto cargado de emociones, confesiones y melodías que conectan desde el primer acorde.

Con un sonido pop que se distingue por su sinceridad y calidez, Mafalda conquistó al público regiomontano, demostrando que su regreso a la ciudad no solo era esperado, sino también celebrado. Canciones como “déjame entrar”, “si tiene que ser será” y “vete a la luna” hicieron vibrar a los asistentes, quienes no dudaron en corear cada palabra y entregarse por completo a la atmósfera íntima que la artista supo construir sobre el escenario.

Antes del acto principal, la noche comenzó con la participación de Neela, también cantautora española que, al igual que Mafalda, llegó a México para seguir su sueño dentro de la música. Su voz suave y letras honestas sirvieron como el preámbulo perfecto, conectando rápidamente con el público y dejando claro que su carrera apenas comienza, pero ya promete mucho.

_{Neela previo al show de Mafalda}

Uno de los momentos más emotivos de la velada llegó cuando Mafalda invitó al escenario a una fan, quien, a través de redes sociales, le había expresado su deseo de cantar una canción junto a ella esa noche. Fiel a su conexión genuina con su audiencia, Mafalda le cumplió el sueño, creando una escena conmovedora que volvió la noche aún más íntima y especial. Entre aplausos, sonrisas y miradas cómplices, quedó claro que la música de Mafalda no solo se escucha: se vive.

_{Mafalda y su fan en escenario}

Entre luces suaves, aplausos constantes y una energía palpable de cercanía, la artista se mostró auténtica, vulnerable y poderosa, compartiendo anécdotas, risas y reflexiones entre canciones. La conexión con su audiencia fue inmediata y profunda, haciendo que cada nota y cada verso se sintiera como una conversación entre amigos.

Este concierto reafirma el crecimiento de Mafalda como artista y su capacidad de crear espacios donde la emoción es protagonista. Mis notas de voz no solo es un álbum, es una experiencia viva, y Monterrey tuvo el privilegio de vivirla de cerca.

_{Fotografías por Carlos Vázquez}